Hay imágenes, escenas, que son eternas.
O, casi mejor dicho, que parecen hechas para ser atemporales, aunque no se tenga más contexto que esos breves segundos.
La Novia gritándole al Monstruo de Frankenstein, Donald Sutherland al final de La invasión de los Ultracuerpos, la ducha de Psicosis o cualquier otro icono que recordéis.
Todas esas escenas viven en unos rincones especiales de nuestra memoria, atrincheradas hasta la eternidad, esperando para colarse en nuestra realidad por un mínimo resquicio.
Entre ellas, aunque no seáis fans de la película o quizás por la influencia de Bob Esponja, se encuentra el Nosferatu de Murnau. Os dejo elegir cualquier imagen icónica: la sombra en la escalera, la figura en la ventana, su silueta en el marco de la puerta o, mi favorita, asomando por la bodega del barco.
La película de 1922 sigue dando para horas de eruditas conversaciones, defensas apasionadas, iconografía ocultista y casi cualquier tema en la órbita de la figura del vampiro colmilludo del Conde Orlok.
No te la acabas, vamos.
Pedro Berruezo, también conocido como John Tones, canaliza toda su fascinación por la película para dar forma a Luz Negra, una novela que gira sobre el concepto de que, quizás, Nosferatu sea una puerta de entrada a nuestra realidad de una oscura entidad.
No ha podido elegir una película mejor, la verdad.
O, casi mejor dicho, que parecen hechas para ser atemporales, aunque no se tenga más contexto que esos breves segundos.
La Novia gritándole al Monstruo de Frankenstein, Donald Sutherland al final de La invasión de los Ultracuerpos, la ducha de Psicosis o cualquier otro icono que recordéis.
Todas esas escenas viven en unos rincones especiales de nuestra memoria, atrincheradas hasta la eternidad, esperando para colarse en nuestra realidad por un mínimo resquicio.
Entre ellas, aunque no seáis fans de la película o quizás por la influencia de Bob Esponja, se encuentra el Nosferatu de Murnau. Os dejo elegir cualquier imagen icónica: la sombra en la escalera, la figura en la ventana, su silueta en el marco de la puerta o, mi favorita, asomando por la bodega del barco.
La película de 1922 sigue dando para horas de eruditas conversaciones, defensas apasionadas, iconografía ocultista y casi cualquier tema en la órbita de la figura del vampiro colmilludo del Conde Orlok.
No te la acabas, vamos.
Pedro Berruezo, también conocido como John Tones, canaliza toda su fascinación por la película para dar forma a Luz Negra, una novela que gira sobre el concepto de que, quizás, Nosferatu sea una puerta de entrada a nuestra realidad de una oscura entidad.
No ha podido elegir una película mejor, la verdad.