Pocos títulos me parecen tan acertados y evocadores para un slasher.
Un slasher, ya sabéis: asesinos, gente joven, cosas truculentas.
Y un código interno. Porque el slasher tiene una serie de normas implícitas, cimentando su propio ADN.
Si hablamos de slashers, Stephen Graham Jones es un maestro, casi un erudito. Además posee una cualidad innata para ser un fanático del género: la insistencia.
Graham Jones formula y reformula el slasher una y otra vez, hasta dar con la mezcla perfecta.
Insiste, al igual que Michael Myers persigue a Laurie, al igual que Freddy atormenta los sueños de Nancy, de la misma manera que Chucky termina con la infancia de Andy.
Porque Graham Jones es un killer y "Mi corazón es una motosierra" es su gran matanza, su masacre del tercer acto.
Título: "Mi corazón es una motosierra"
Autor: Stephen Graham Jones
Editorial: La Biblioteca de Carfax, 2023
Traducción: Manuel de los Reyes
Cubierta: Rafael Martín
Páginas: 464
Tapa blanda con solapas
Jade Daniels es una adolescente fanática de los slashers que vive en Proofrock, Idaho, un pueblo situado al lado del lago Indian. En la otra orilla del lago se encuentra el Campamento Sangriento —donde tuvo lugar una masacre hace cincuenta años— y Terra Nova, un moderno Camelot a la americana. Cuando empieza a morir gente, solo ella parece saber qué esta sucediendo gracias a todo su conocimiento sobre películas de terror. Jade elige a Letha Mondragon, hija de uno de los fundadores de Terra Nova, como la chica final que se enfrentará y vencerá al asesino, pero la vida real se rige por sus propias normas y a Jade no le quedará más remedio que afrontarlo.
Algunas chicas sencillamente no saben morir.
Os podría engañar.
Una mentirijilla piadosa, de las típicas en estos mundos de reseñas, influencers de Instagram y cuentas de redes sociales de sacar fotos y abrazar libros.
De las de "cinco estrellas" y "me lo he leído en una noche".
Os podría decir que tenéis que leer este libro porque os va a gustar al 100%.
Conmigo lo ha hecho: me ha fascinado, ha cumplido todas mis expectativas y me ha regalado un personaje inolvidable, además de una cantidad inabarcable de referencias y reflexiones sobre slashers.
Pero, para eso, tengo que hacer una advertencia: no es un libro construido como un best seller, no es una novela que conceda nada al público lector y no es sencillo.
Y lo más importante: esto, hoy, no es una reseña.
Todo, absolutamente todo, comienza con una chica.
Jade Daniels es un personaje que se define en una única página, en un primer vistazo.
Página 29, por si os pica la curiosidad (la tenéis justo encima).
Stephen Graham Jones la define a la perfección, combinando descripciones físicas con detalles de su personalidad.
Jade va a ser nuestra protagonista, la que nos va a llevar de la mano ensangrentada (casi con un guante negro, como los buenos giallos) por todo Proofrock viendo las señales de una masacre inminente.
Jade tiene 17 años, tiene ascendencia nativa americana, no se encuentra cómoda en la sociedad actual y necesita graduarse en el instituto para cerrar esa etapa y abrir otra.
O ninguna, ya se verá.
¿Su único consuelo? Ver su colección de películas pirata en vhs en su vieja tele con reproductor de vídeo incorporado. Jade sólo entiende la vida así, entre las rayas de la reproducción de una cinta de vídeo, sangre falsa imposiblemente roja, cámaras subjetivas para ponerte en la piel de un killer y jóvenes pecaminosos expiando sus excesos hormonales en forma de mortales heridas lacerantes.
Jade lo sabe todo sobre los slasher, y cuando digo todo, me refiero A TODO.
Así que no puede evitar ver señales en todas partes: una extraña muerte en el lago, la llegada de unos ricachones de ciudad para construir una zona residencial en la otra orilla, el fin de curso, etc.
Todo son señales: aquí va a haber una masacre.
Y, como dicta la ley no escrita de los slashers, si hay masacre y asesino, hay una final girl, una chica final.
Jade, claro, no se considera a si misma una chica final, no puede serlo. Pero Letha, la perfecta, rica y afortunada Letha Mondragon, si.
Jade es un personaje complejo, incluso más grande que la propia novela. Además de su excelso conocimiento sobre el slasher, con el que atormenta al Señor Holmes, su profesor de Historia, en forma de redacciones bajo el título de Introducción al slasher, Jade está profundamente marcada por la leyenda del Lago Indian y su bruja. Un lago que parte Proofrock en dos, dejando al otro lado un parque natural y que, bajo sus aguas, encierra al pastor Ezekiel y su rebaño de fieles creyentes. Un lago en el que murió una joven india, hace tanto tiempo que la leyenda se mezcla con la historia. Historia india, abusos sociales, nuevos ricos en el contexto de la actualidad, leyendas y naturaleza. Graham Jones encuentra encaje para todo.
Jade es compleja, como decía. Esta obsesión por el slasher esconde una mitad atormentada, que se rebela contra una sociedad que la excluye por tantos motivos que no pueden enumerarse y que genera una superviviente.
Aunque ella no lo sepa.
Aunque ella no lo pueda ver.
Sus raíces nativas, una imposible y dañina relación con su padre y esa idea de ser una incomprendida, de estar fuera de todo. "Mi corazón es una motosierra" es un slasher pero, como todo buen slasher (¿os acordáis de Frendo?) es un coming of age.
¿Qué edad? La que queráis.
Yo paso de los cuarenta y todavía no se a dónde voy.
La importancia de un personaje como Jade, en cualquier novela, sería fundamental pero en "Mi corazón es una motosierra" se vuelve capital. Y no porque sea ella la conductora y nuestros ojos (imagináos el principio del "Halloween" de John Carpenter, con la máscara puesta en la lente, imitando la mirada del pequeño Michael acechando en casa. Eso hacemos al leer el libro, nos ponemos la máscara de Jade) sino porque Jade es la mente de Stephen Graham Jones.
Bum.
Toma giro.
Ni James Wan en "Maligno".
¿Tengo pruebas? Quizás no, pero dejaos llevar. No seáis un muermo.
Ahí saltamos a otro capítulo: el estilo de Graham Jones.
Graham Jones, además de ser un rey del slasher, es un narrador.
No, mejor.
Un Narrador.
Con N mayúscula.
Si hay autoras y autores a los que les sirve una breve descripción y mucho diálogo, Graham Jones lo narra todo.
Describe, relaciona, construye.
Y va un paso más allá, genera una corriente de pensamiento, de información, un volcado completo de datos relacionados (o no), sin perder de vista la construcción de la historia pero dando las vueltas y revueltas que necesite. Es capaz de construir escenas tensas y con ritmo, como el último tercio del libro, o darse el lujo de disertar sobre el cine de terror. Y con un fino sentido del humor que casi ni percibes.
Este tetrico palacio mental de Graham Jones, lleno de máscaras, machetes, datos de "Tiburón", identidad, cultura nativa americana o naturaleza, toma la forma de Jade Daniels y es nuestra interlocotura válida en la novela.
Asumo que Jade Daniels es la mejor forma de asomarse al interior de la mente de Graham Jones, como si usasemos la llave de la mente de "Locke & Key".
¿Habéis puesto la antena?
¿Tenéis la atención a tope?
Hablaba, muy al principio, en la prehistoria de esta no-reseña, que "Mi corazón es una motosierra" no es un libro fácil para la mayoría de público, no da facilidades ni pretende ser un best seller facilón.
Su carácter de canto de amor al slasher es uno de esos obstáculos y otro es el estilo.
Graham Jones no negocia con su estilo, es suyo, forma parte de su personalidad y de una carrera de muchos años de ensayo y error, de trabajo, de construcción. Renunciar a ese estilo para construir un slasher definitivo, facilón y lleno de lugares comunes, hubiese sido una traición imperdonable. Y no a nadie en particular, si no al Graham Jones que se quedaba toda la noche despierto viendo viejos slashers que sale en los impagables agradecimientos finales.
El estilo, cuando es único y personal, no se regala, no se vende y no se negocia. La personalidad es la mejor chica final que un escritor o escritora puede tener y a Graham Jones le sobra.
Si en el cine slasher podemos empezar con "Bahía de sangre" de Mario Bava, irnos a "Viernes 13", "Pánico antes del amanecer", "Pesadilla en Elm Street" y llegar hasta, no se, "Scream" para hacer una línea del tiempo de cine slasher, en el mundo literario del slasher de Graham Jones podemos ir de "Demon theory" y "The last final girl" (que alguien las rescate en castellano, por favor) hasta "El único indio bueno", pasando por algunos detalles de "La noche de los maniquís".
Al igual que las películas van tomando detalles de aquí y de allí, del cine de los 60, de los primeros giallos, del primero que metió a un asesino enmascarado, la primera machetada o el primer giro sobrenatural en una franquicia, "Mi corazón es una motosierra" se forma con detalles de los trabajos anteriores de Graham Jones.
Y así, como la revelación final de un slasher, hago un giro loco, con todo lo que ya sabemos, y me planto en el principio.
¿Es el mejor slasher de Graham Jones?
Nada en la vida es tan sencillo para zanjar con un rotundo si o un no, queridas mentes.
Intentaré simplificarlo.
¿Es el más perfecto?
Que Wes Craven nos libre de la perfección. No, no lo es.
Pero es el mejor, de lejos.
Aunque hay un paso intermedio que considero imprescindible.
¿Habéis leído a Graham Jones?
Si la respuesta es "no", os recomendaría empezar por, por ejemplo, "El único indio bueno". Me parece una novela más accesible y que tiene una sensación parecida pero manejable.
Eso si no tenéis unos conocimientos sobre cine slasher magistrales. Pero no me refiero a que sabéis que el asesino del Viernes 13 original es Pamela Voorhees, no. Auténticos conocimientos magistrales sobre slasher, de los que dejarían al Randy de "Scream" pasmado.
Ese es el nivel.
Entonces si, la váis a disfrutar.
Y si habéis leído a Graham Jones y os gusta su estilo, enhorabuena. Esto es Graham Jones al cubo, a la máxima potencia, sin freno ni ataduras.
Un tipo capaz de construir una leyenda plagada de cultura nativa, hacer una lúcida reflexión sobre "Tiburón", lograr que asome una lagrimilla con la historia de Jade o llenar de sangre festiva el tercio final de la novela.
Así que: ¿es el mejor slasher de Graham Jones?
Para mi, sí.
"¿Que si sí o que si no?"
Un sí rotundo, mayúsculo, en dramáticas letras rojas que llenan la pantalla con una atronadora banda sonora de sintetizador.
Pero, como veis, no os puedo engañar. Espero que os quede claro en dónde os metéis.
No soy editor o editriz, pero me imagino que, aunque publiques la obra de un autor, siempre llega una novela complicada. Un libro que tiene un título magistral, una premisa atractiva, un poderoso imaginario visual pero que, quizás, pueda generar una idea equivocada.
Al igual que hay público que va a ver películas de terror por eso de las risas, las tripas cutres y "es tan mala que es buena".
Por eso, publicar "Mi corazón es una motosierra" me parece muy valiente y agradezco a La Biblioteca de Carfax el esfuerzo que han hecho.
Una novela grande, enorme, libre de prejuicios y que escapa de las peligrosas etiquetas de alta o baja cultura, de ver al terror y al slasher como una cosa menor.
Escapa como Tommy Jarvis al final de "Viernes 13: El capítulo final", identificándose con el corazón del monstruo, llamando su atención...para clavarle un machete en la cabeza.
Hablando de monstruos, atención a la traducción de Manuel de los Reyes. Magistral, con un trabajo, además, de localización impecable. Y con listado final de películas. Traducir a Graham Jones tampoco debe ser sencillo, así que, con deberes extra ya...
"Mi corazón es una motosierra" es mi slasher de Stephen Graham Jones favorito, un canto de amor al cine de terror y a las formas de pensar y vivir que no son normativas. Un ejercicio de estilo de Graham Jones absoluto y que requiere de un compromiso por parte del lector.
Un libro que requiere una lectura paciente, con calma, para disfrutar.
No te regala nada pero termina por dártelo todo. No te trata como a un tonto ni tira por el camino sencillo y efectivo.
Nadie dijo que controlar una motosierra a plena potencia fuese sencillo...
Brutal "No Reseña"...es la mejor "No Reseña" que he leído en mi vida...hoy mismo me pediré el libro...no he leído a Graham Jones... pero si que tengo un muy amplio conocimiento de películas de amor a primera cuchillada...soy Juan Flores...y me has dejado sin palabras... brutal Luis...
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Juan. Este libro es un acierto seguro, sé que no te va a decepcionar. Espero con ganas tu opinión. Un abrazo!
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