viernes, 9 de septiembre de 2022

Lo que entra por los ojos (I)

Lo que entra por los ojos termina por alimentar los sueños, la mente.
Tenemos, últimamente, más contenidos que nunca, con cosas que jamás hubiésemos soñado: series, películas, divulgación, discusión, análisis..., en mil plataformas, de pago o gratis, con disponibilidad inmediata y las 24 horas.
¿Hay algún problema?
Pues si y no; todo a la vez, al mismo tiempo.

Muchísimo contenido pero una escasez de intención. El modelo de negocio (ojo, siempre ha estado presente...) y sus cuentas, cábalas y algoritmos copan cualquier tipo de motivación. 
Y lo estamos sufriendo, para bien y para mal. 
Aún así, hay esperanza. 
Por aquí os dejo la mía.
Disfrutemos.


"¡Nop!" - Jordan Peele, 2022

"Get out" y "Us" me generaron un leve conflicto. Me gustan, las disfruté un montón y entiendo sus motivaciones pero me falta algo, un último click.
Y quizás, en su película más fantástica, extraña y con las ideas menos evidentes, Peele me haya convencido.

Conviene saber poco acerca de la película antes de acercarse y aproximarse con la mente abierta.
"¿Qué estoy viendo?" puede ser la pregunta repetida durante la primera parte. Adiestradores de caballos para el cine, viejas sitcoms, relaciones familiares y extraños fenómenos nocturnos en un rancho. Y algún chimpancé.
De ahí, al vacío.
Peele construye una historia con unos hermanos tan antagónicos como Daniel Kaluuya y Keke Palmer con un par de interpretaciones maravillosas, la siempre bienvenida presencia de Steven Yeun y una misteriosa amenza, tan voluble e invisible como llena de lecturas.

Jordan Peele sacude el árbol y de él, bajo su apariencia de The Twilight zone, caen mil ideas: sociedad, nuestros miedos, el estado del cine actual, la familia y el legado, etc.
Todo está ahí, escondido a plena vista, inmóvil y que termina por explotar en una última parte que me recordó a "Tiburón".
Y con un final para pensar, discutir, entristecerse o, quizás, soñar.
Tiene altibajos, claro, y esa primera mitad requiere un esfuerzo por parte de los espectadores menos entregados a la causa pero hacen falta más películas así, llenas de combustible.

"The Sandman", Temporada 1 - Netflix, 2022.

"The Sandman" es la mejor temporada de "Doctor Who" de una serie que no es "Doctor Who".
Y creo que ese es un gran cumplido.

Un cómic difícil de adaptar, casi imposible, y consigue respetar y potenciar parte del material original de Neil Gaiman.
Uno de esos fenómenos extraños que suceden cada mucho tiempo.
Tiene unos capítulos excelentes como "24 horas", "El sonido de sus alas" y el inesperado episodio 11.
Quizás Tom Sturridge sea el Morfeo ideal pero su actuación pierde con el paso de los capítulos, quizás Kirby Howell-Baptiste no sea la Muerte que muchos esperaban pero te cautiva con su primera mirada o Lucifer mantiene la batalla dialéctica con una Gwendolyn Christie maravillosa, además de un David Thewlis espectacular.
El mundo de los sueños es así, mantenedlos vivos.
Netflix, renueva esto ya, por favor.

"Orphan: First kill" - 2022

¿Había necesidad de recuperar a Esther después de la excelente "La huérfana" (Jaume Collet-Serra, 2009)?
No creo, en principio, pero después de ver "Orphan: First kill" me alegro que se hayan lanzado.

Una precuela que transita por caminos similares a la anterior entrega en su primera mitad hasta, oh sorpresa, un magnífico giro argumental que lo cambia todo por completo.
Un thriller modélico, con su ración de asesinatos, lleno de trucos de cámara para obviar que la protagonista, la tremenda Isabelle Fuhrman ha crecido.
Julia Stiles también merece un aparte, en su papel de madre sufridora.

Como decía, un thriller muy entretenido, oscuro, con una gran pizca de maldad y un buen ejemplo de sacar adelante un proyecto del que nadie esperaba nada y parecía agotado.

"Elvis" - Baz Luhrmann, 2022

Resulta chocante que, en plena era de los superhéroes, con mil adaptaciones y conquistando todos los aspectos de la cultura popular, estemos más faltos de héroes y heroínas que nunca.
Faltos de soñar, de mitos, de gasolina para nuestras motivaciones mundanas.
Baz Luhrmann convierte a Elvis en material para soñar con un biopic ejemplar y arriesgado.
Quizás hubiese sido más fácil otro enfoque, alejado de la figura como narrador no fiable del Capitán Parker, interpretado por Tom Hanks (tan bien como siempre, faltaría más), deteniéndose en algunos aspectos de Elvis que quizás se pasen por alto. Pero no hay freno posible cuando las ideas estan claras.
Cambiamos el frenesí visual recargado del director por una versión más eficiente del mismo, si perder ni un átomo de personalidad.
Planos magníficos, coqueteos con el terror en algunas partes, la visualización de la música... Una maravilla audiovisual.

Y la interpretación de Austin Butler, sin caer en tópicos (hola, Rami Malek) , con un respeto medido hacia la figura de Elvis, al igual que el resto de la película. 
Reflejos distorsionados, jaulas de oro, la confianza mal depositada, la relación con Priscilla... todos los elementos se aúnan para convertir a Elvis en un mito, cosa que ya era. 
En un héroe de nuestros sueños.
Dos horas y media que saben a poco. 
Ojalá no terminase nunca.

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